No abrazar en vano la perfecta soledad

Para llegar a la caverna
Llevando a cuestas tus años temblorosos
Para sentarte a tejer telarañas
A la orilla del reloj
Si quieres o si debes, algún día
Abrazar la perfecta soledad

No traigas contigo
Ni un retrato, ni una voz
Ni aromas, ni nombres, ni medallas
Para ser lluvia entre la lluvia
Sé transparente
Indistinguible
Efímero

De lo contrario, el tiempo
El tiempo
El tiempo!
Sentirás conmigo el tiempo.
Cubrirás las paredes
Con dibujos de ceniza
Y haciendo el amor con fantasmas
Marcarás tus dientes
En las rocas frías

No verás los ojos secos
Que desde viejos nichos
Rodearán las quimeras grises
De tu pobre libertad.
Pero cuando al fin
El silencio te encierre
Te unirás sin saberlo
A nuestro ejército de sombras
A esperar el día en que salgamos
Cuervos falsos
A gritarle a la esperanza
¡Nunca más!

Sí, ni un retrato,
ni un aroma
O mejor, no busques siquiera
Abrazar en vano
La perfecta soledad